La música es una poderosa herramienta para nuestra salud y bienestar, nos puede ayudar a nivel mental, físico y espiritual. Pero debemos tener cuidado y seleccionar las melodías adecuadas que nos permitan afianzar cada uno.
Escrito por: Ivan De Leon
La música es ideal para nuestro bienestar mental, la podemos utilizar como complemento para la meditación, ejercicios de relajación y reducción de los niveles de estrés. El ejercicio mental de aprender a tocar un instrumento musical es otro factor determinante que puede ayudarnos a relajarnos y desconectar del día a día. Por otro lado, la música la podemos aplicar a nivel físico, un buen ritmo nos puede motivar a bailar o incluso a hacer ejercicios aeróbicos tales como correr, spinning, saltar, aerobics, etc. En el lado espiritual, existen muchas melodías que nos pueden ayudar a conectar con fuerzas superiores, de otras dimensiones, Dios o como lo quieras llamar. Si combinamos todos estos factores tendremos un kit ideal para mejorar nuestra salud y bienestar.
La música nos puede ayudar a escaparnos mentalmente a cualquier lugar que nos permita nuestra imaginación. Cuando escuchamos la pieza adecuada, con un ritmo y una melodía que llegan a lo más profundo de nuestro ser, podríamos decir que la música está cargada de emociones. Pero debemos tener cuidado con las emociones que despertamos, ya que estas no siempre son positivas. Una pieza que nos traiga un mal recuerdo puede afectar nuestro estado de ánimo y si no tenemos cuidado podríamos hasta caer en depresión. Es preferible enfocarnos en las melodías que nos producen pensamientos positivos, está comprobado que pensar en positivo mejora la salud.
Otro aspecto importante para estar sanos es socializar y compartir con los demás. En un encuentro, ya sea entre familiares y/o amigos, la música puede ayudar a realzar el entorno positivo del ambiente. En este caso lo ideal es que la música sea acorde con el motivo de la reunión y que permita socializar de una manera agradable y placentera guardando relación con la ocasión.
Por supuesto que si no elegimos el momento y la música adecuadas, podríamos producir un efecto contrario. ¿A quien no le ha sucedido que una melodía se puede convertir en algo totalmente desagradable y molesto hasta llegar a provocar dolores de cabeza? Por eso es importante que eligas con detenimiento la música que deseas escuchar y si no estas en posición de hacerlo, siempre tienes la opción de dejar de oirla, saliend del recinto o incluso colocando tus manos/dedos en tus oidos.
Me gustaría ampliar este artículo con una selección de piezas musicales para cada caso, pero es una tarea complicada debido a que cada persona tiene gustos particulares. Cualquiera podría pensar que la música relajante siempre tiene un ritmo suave, pero tengo un amigo que escucha del tipo Trash Metal y en él produce un efecto sedante que incluso hasta le facilita el sueño, quien sabe, quizás ese tipo de música le trae recuerdos muy placenteros de su juventud.
Y a ti, ¿qué música te gusta para relajarte, hacer ejercicio y/o conectarte con lo divino?
Artículo redactado por Iván de León de eVidaSana.com, una web cargada de trucos e información actualizada para vivir más sanos.
Un comentario
Totalmente cierto. la música es fundamental para poder llevar una buena vida