Una buena reunión venezolana siempre incluye un buen jamming con los instrumentos que se encuentren a la mano. Cada quien agarra su instrumento y a tocar y cantar cuanta canción se pase por la mente. Pero ¿qué pasa cuando en esa reunión están Jorge Glem, Gabriel Grossi y André Vasconcellos?
En esta reunión sobraba talento. Basta con escuchar lo que hace Gabriel Grossi con la armónica para darse cuenta de ello. Y ni hablar del cuatro de Jorge Glem o de la calidad del bajo de André Vasconcellos.