Las progresiones musicales se indican por escrito en números romanos. Es una forma estandar que facilita el conocimiento de qué acordes o notas se deben tocar cuando se interpreta una pieza en una tonalidad específica.
En una progresión encontraremos la información necesaria para descubrir qué acordes acompañan a la tonalidad principal. Por ejemplo, si la progresión es del tipo I – VI – V7, entonces tendremos que interpretar los siguientes acordes dependiendo de la tonalidad:
Tonalidad Do
Se entiende entonces que si la tonalidad, en este ejemplo, es el Do Mayor, debemos utilizar la cuarta nota y la quinta nota (en su forma séptima) para tocar junto con do. Partiendo de Do, la cuarta es Fa (Do – Re – Mi – Fa) y partiendo de Do, la quinta es Sol (Do – Re – Mi – Fa – Sol)
Veamos entonces otros ejemplos de la misma progresión.
Tonalidad Re
Tonalidad Mi
Tonalidad Fa
Igualmente se podrá realizar la secuencia de acordes para progresiones más complejas, siempre y cuando se parta de la tonalidad como primer acorde o tono principal. Por ejemplo, veamos esta progresión:
Si escogemos la tonalidad de Sol Mayor como la principal, entonces tendremos que esta progresión se toca con los siguientes acordes:
Tonalidad Sol
Así podremos entonces tocar cualquier género de la música venezolana siempre y cuando sepamos la progresión a la cual está sujetado. Por ejemplo un seis por derecho, una periquera, etc