¿Eres músico venezolano y te has convertido en padre o madre de una nueva criatura que te mueve el alma y te tiene enamorado/a? ¿Te gustaría que tu bebé desde muy pequeño lleve en sus venas nuestra forma de ser, nuestras costumbres como venezolano?
Un buen comienzo que le vendrá bien es con música venezolana (composiciones que forman parte de nuestra infancia o de la de nuestros padres y abuelos), ya sea mientras está dormido/a en la cuna, juegas con él o ella, toma su tetero en la sala o simplemente durante sus siestas.
Sabemos que la moda es buscar un disco de orquesta, o discos clásicos de pianistas como Richard Clayderman o Alfred Brendel, entre otros, pero ¿por qué no potenciar el cerebro de nuestros “bombones” con el ritmo, la melodía y armonía de nuestro cuatro venezolano?
Es por ello que queremos compartir contigo melodías que seguramente activarán las dendritas del cerebro en tu hermosa creación, para hacer sinapsis positiva y que esto le permita un desarrollo mental y de otras habilidades al mismo tiempo.
Estas son algunas de las canciones que puedes poner a sonar con el instrumento nacional por excelencia, el cuatro:
- Alé limón
- Negrito con
- A la víbora
- Mi niña bonita
- María Moñitos
- Payasito saltarín
- Piso pico
- Doñana
- La lora
- Aniceto Rondón (aunque es una gaita, suena muy bien en versiones de cuatro).
Todas estas canciones las puedes encontrar en el disco El cuatro de Fredy Reyna (1994) que puedes escucharlo completo aquí.
Sabías que
Según los especialistas, si se le acostumbra a un niño a escuchar música, este puede crecer con mayores posibilidades de desarrollar su creatividad, la música en general es considerada una de las cosas que más fomentan la imaginación y la sensibilidad en ellos.
Lo más importante de todo es que tu niño/a crezca sano y espiritualmente fortalecido, y quien quita, interesado por tocar un instrumento musical. Al final, los expertos aseguran que adquieren muchas ventajas emocionales e intelectuales cuando desarrollan estas habilidades.
Aunque no sea música clásica lo que escucharán, pero sí clásicos de nuestra música venezolana, lo mágico de todo esto no solo desarrollarán funciones cerebrales importantes durante su crecimiento, sino que llevarán en su ADN nuestra idiosincrasia.